Vino, bebida alcohólica obtenida del zumo de las uvas maduras fermentadas, que nos hace pasar momentos increíbles, junto con amigos y familiares. Pero tomarse una copa para disfrutar la comida o ir a una cata de vino puede llegar hacer uno de los hobbies más increíbles.
Hoy te diré por qué

Qué aprendes en una cata de vino
He ido varias veces a catas de vino y debo decir, es una de las actividades más geniales. Por varios motivos, evidentemente conoces varias personas que disfrutan de la pasión del vino como tú, segundo, aprendes más sobre esta bebida, cómo tomarlo y disfrutarlo.
Una vez vas a una cata jamás volverás a tomar el vino de la misma manera. Porque sencillamente recibiste la charla de un experto, de un Sumiller, enólogo o catador de vinos. Estas son personas con un bagaje cultural extraordinario
Qué es un sumiller
Estos son expertos en vinos, son los encargados de decirle al cliente cuál es su mejor cosecha, si es joven o no, y además te dice qué tipo de vino debes tomar y para qué tipo de comida.
En la cata de vino estas personas te dicen paso a paso que debes hacer
- Lo primero es aprender a agarrar la copa. Uno de los errores más comunes es tomarla con la mano desde el cáliz. Debes es tomarla con los dedos desde la base. (Si la tomas con la mano calientas el vino)
- Después te dicen huele el vino: Qué olor sientes, qué fruta sientes, ¿amaderado o no?
- A continuación, debes voltear un poquito la copa sobre algo blanco para ver el color del vino
- Luego, moverás la copa para ver las gotas caer.
- Después, lo debes probar, pero acá es un sorbo y lo mantienes en la boca. Esta primera sensación es importante. Sentirás si es ácido, amaderado, qué frutas, qué tan fuerte es. En otras palabras, confirmarás tu olfato.
- Como normalmente en las catas de vinos tienes que probar varios. Te ponen varias copas desocupadas, cada copa es para un vino distinto. No se debe servir en la misma, ya que las características cambiarán ahí mismo.
- Cuando vas probar un vino distinto debes de limpiar tus papilas gustativas. Y cómo lo haces, debes de comer un pedazo de pan o de queso y ahí si puedes continuar con el siguiente.

Y por qué es bueno para la salud
- Es un antioxidante poderoso. Está más que comprobante que ayuda a retardar los efectos del envejecimiento. Pero claro, siempre con moderación, esto no de emborracharse y perder el sentido.
- Te ayuda bajar de peso puesto que impide que se forme las células de la grasa. Esto funciona si mantienes una dieta equilibrada y acompañada de ejercicio.
- Previene las enfermedades del cerebro como demencia o degenerativas
- Aliado para las encías, porque evitan los estreptococos, bacterias relacionadas con las caries.
- Gracias a los flavonoides que tiene el vino reduce los efectos de los rayos ultravioletas en la piel
- Nos ayuda a liberarnos de las endorfinas
- Limpia la sangre y los vasos sanguíneos, por lo tanto, perfecto para el sistema cardiaco
- Disminuye el riesgo de sufrir de cáncer
- Al tomar vino con las comidas hace que le sintamos un sabor más intenso
- Es ideal para las infecciones urinarias.
En pocas palabras, a tomar vino, pero con moderación
¿Disfrutas de una copa?
Referencia Bibliográfica
En copa de balón. Año: 2017
Nuevos horizontes. Año: 207